El director de la Oficina de Defensa de los Derechos del Menor (ODDM), Gaspar Rul·lan, pide a los padres de Balears que respeten la calificación de edad recomendada de las películas que se exhiben en las salas de cine comerciales y que se está obviando de manera creciente en los films de terror o de alto contenido violento.
Rul·lan considera que «lo lógico es cumplir» la calificación y, al mismo tiempo, asevera que los padres «deberían tener un nivel de responsabilidad suficiente como para no ir con los niños a ver ciertas películas». Respecto a las empresas de salas de exhibición, consideró que «si se demuestra que la cosa va más allá de lo esporádico, deberían hacer un esfuerzo para pedir la identificación a estas personas». Por su parte, fuentes de Cinesa, empresa que gestiona actualmente el multicines de Festival Park, corroboraron a Europa Press que se están dando con mayor frecuencia casos de progenitores que introducen a sus hijos, niños de entre 2 y 10 años, en algunas de sus salas, en las que se exhiben películas de terror o violentas, sin que se pueda controlar esta forma de actuar: «Vienen a la taquilla, compran 4 o 5 entradas y no sabes con quién van a entrar», precisaron.