Cerca de 250 residentes peruanos en Mallorca celebraron ayer la festividad del Señor de los Milagros, procesión del Cristo de Pachacamilla, en la iglesia Corpus Cristhi de Son Gotleu. Es una fiesta que organizan a título personal los mayordomos, esto es, personas que de alguna manera quieren agradecer algún favor o simplemente expresar su devoción. En esta ocasión los mayordomos han sido Celina Cordova Loya y Arturo Martínez y familia.
La devoción al Señor de los Milagros tiene su origen en el año 1650, aproximadamente, tal y como relata Arturo Martínez Luque. «Por aquel año se produjeron varios terremotos de una gran intensidad en Perú. Una de las pocas paredes que se mantuvieron en pie durante las sacudidas fue, precisamente, la de un esclavo negro que había pintado un Cristo crucificado, de ahí el nombre y la devoción».
La fiesta comenzó con una misa celebrada por el padre Esteban, conocedor de la tradición peruana. A continuación, se realizó la procesión en el patio del rectorado, una muestra de bailes folclóricos y una degustación de comida típica realizada por todos los invitados a la fiesta.