JOSÉ SEVILLA-MADRID
El secretario general del PSIB-PSOE, Francesc Antich, calificó de muy positiva su reunión de ayer por la tarde, durante una hora, con el ministro de Industria, Comercio y Turismo, Joan Clos, quien se comprometió a participar desde el Gobierno central en la reconversión de la Platja de Palma, a la vez que informó al diputado mallorquín de que el gasoducto llegará a las Islas en 2008, según las previsiones oficiales, y el cable en 2009. Sin embargo, «podría haber algún retraso» en estas fechas, advirtió Antich. A Clos le acompañó su secretario general de Turismo, Martínez Fraile.
En cuanto a la inversión desde el Ministerio de Turismo en la remodelación y modernización de la Platja de Palma, «el ministro nos ha ofrecido todo su apoyo» y, sobre el dinero estatal que llegará para este proyecto, el Estado «invertirá según sea su grado de participación en el consorcio urbanístico» que deben constituir los ayuntamientos de Palma y Llucmajor, el Consell Insular, el Govern balear y el propio ministerio. «Ya se ha llegado a acuerdos del estatuto del futuro consorcio», señaló el ex president balear, que dejó claro que al final debe primar un acuerdo entre Ministerio de Industria y Ejecutivo de las Islas. «Ya me habría gustado a mí que siendo presidente, la oposición (del PP) se hubiera preocupado por venir a Madrid a conseguir cosas para Balears», dijo criticando al Govern de Matas.
Sobre el tema del gasoducto y la línea de cable que llegará desde la Península, Antich afirmó que presionará al Ministerio de Medio Ambiente para que tenga acabados lo antes posible los estudios de impacto ambiental. «Haré gestiones para ver cómo van los trámites para finalizarlos lo antes posible», apuntó, y agregó: «El ministro nos ha dado su apoyo para que ambas infraestructuras funcionen cuanto antes».
El Consorcio para desarrollar la reforma de la primera línea costera palmesana «debe ser urbanístico» por lo que habrá que «analizar las plusvalías ya que habrá déficits a los que deberán hacer frente las instituciones». Y acabó diciendo que este proyecto es emblemático de cara a Europa. «Es una de las principales playas a nivel europeo y su reconversión es un mensaje de Balears de que hace un esfuerzo importante en mejorar las infraestructuras turísticas».