EPR-J.M.A.
La Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos (FAPA) de Mallorca ha propuesto a la Conselleria d'Educació i Cultura la posibilidad de que sean las propias familias las que aporten los 15 millones de euros iniciales que consideran necesarios para poner en marcha un sistema de préstamo y reutilización de libros de texto en los centros educativos de Primaria y Secundaria de las islas.
Al respecto, el director general de Planificació i Centres de la Conselleria d'Educació, Rafael Bosch, declaró ayer a Ultima Hora que «por supuesto, estudiaremos con detenimiento esta propuesta de las APA y confío en que podamos llegar a un punto de acuerdo». «Nuestra disposición -añadió- es a sentarnos con ellos para que nos expliquen la propuesta directamente».
Asimismo, Martín criticó la iniciativa de algunos ayuntamientos, como el de Calvià, de otorgar ayudas a los padres de alumnos a este fin al considerarlas «insostenibles» y sin el carácter formativo que, afirmó, deberían tener. «El sistema de préstamo y reutilización es mucho más eficaz, pero necesita la implicación de la Conselleria», apuntó.
Por su parte, la representante de la Federación en el Consell Escolar de Balears, Catalina Esteva, recordó que el gasto que supone a las familias del archipiélago la compra de libros de texto asciende a unos 15 millones de euros cada año y que la única Comunidad Autónoma que todavía no aplica el sistema de préstamo o tiene previsto hacerlo es Balears.
Ambos representantes detallaron que su propuesta consta de la mencionada compra inicial de libros de texto que pasarían a ser propiedad de los centros. Estos los cederían cada año a los alumnos con las medidas pertinentes de control para garantizar un uso responsable de los mismos, ya que de no producirse, la familia del alumno debería pagar el material estropeado.
Además, sería necesario realizar una renovación de los libros desgastados por el uso, lo que supondría un coste anual a la Conselleria de entre 1,5 y dos millones de euros. «Hablamos de cantidades muy inferiores a las de otros epígrafes de los presupuestos autonómicos», dijo Martín.
El presidente de la FAPA de Mallorca añadió que también deberían introducirse cambios en el formato de edición de los libros ya que, actualmente, están pensados «para no durar», señaló. «Las tapas son blandas, no actúan como guarda de las hojas, que además son de poca calidad y se ensucian mucho», apostilló.