Palma celebró ayer la VII Jornada Europea de la Cultura Judía, en la que participaron instituciones públicas y privadas. Un total de 22 países europeos celebran esta jornada como integrantes de la Red de Juderías o simplemente como colaboradores. En el caso de Mallorca, este es el segundo año que lo hace como integrante.
La jornada comenzó con una visita guiada por el Call, el barrio palmesano en el que vivió la comunidad judía y que conserva la estructura de sus callejuelas. Los recorridos, que partieron a varias horas de la Plaça de la Reina, fueron gratuitos.
La sinagoga, ubicada en la calle Monseñor Palmer, acogió una jornada de puertas abiertas desde las 10.00 hasta las 13.00 horas, por la que pasaron unas 500 personas. Los asistentes pudieron contemplar una serie de objetos de culto de la religión judía como «La Torá», los libros sagrados; el «lad», la varetilla de plata que sirve para señalar el texto sagrado; o el «talit», la vestimenta tradicional, entre otros. Además, había una explicación de las fiestas judías como el «Shabat», el día de descanso; el «Rosh Hashaná», año nuevo judío; y el «Pesah», fiesta que conmemora el éxodo de los judíos de Egipto. También se proyectó un audiovisual sobre las sinagogas del mundo y el rabino Shaul ofreció una charla sobre judaísmo.