El presidente del Govern, epopular Jaume Matas, anunció ayer que el PP introducirá una enmienda durante la tramitación parlamentaria de la Llei de Capitalitat para garantizar un «blindaje» de 30 millones de euros anuales para Palma, «para evitar que se pueda volver a producir una situación como la que vivió Palma cuando gobernó en Balears el Pacte de Progrés». Matas añadió que, de este modo, gobierne quien gobierne en Cort o en la Comunitat, la capital balear tendrá un mínimo de recursos económicos asegurados.
Previamente a este anuncio, Matas se había reunido con la alcaldesa de Palma, la popular Catalina Cirer, quien había entregado al presidente del Ejecutivo autonómico el contenido de la propuesta aprobada por unanimidad en el pleno celebrado el pasado 17 de mayo, que señala que «el pleno del Ajuntament acuerda pedir al Govern que, en la Llei de Capitalitat, y para la compensación de los costes de capitalidad, se tenga en cuenta el estudio efectuado por los servicios económicos municipales, así como los estudios que considere oportunos». El citado estudio cifra los costes de la capitalidad en 31,3 millones de euros.
Dicha propuesta, presentada por el equipo de gobierno municipal, era alternativa a otra presentada por la oposición, que pedía que Cort acordase pedir al Govern la inclusión de la financiación de los costes de capitalidad en la ley citada. En este sentido, el portavoz del PSOE, Antoni Roig, expresó ayer su satisfacción «por la rectificación del PP», y pidió que la futura ley contemple también «la deuda histórica que Palma ha sufrido en materia de inversión».
Cirer, por su parte, hizo ayer una valoración muy positiva de la decisión de Matas, que agradeció en nombre de la ciudad, y recordó, asimismo, que todo el proceso que desembocará en la Llei de Capitalitat se inició en el Ajuntament hace cinco años.
Cabe recordar que en julio de 2001 fue aprobada en el Consistorio, por unanimidad, la Carta Municipal, que es el precedente directo del actual proyecto de ley.