P. CANDIA/ T. LIMONGI
Un centenar de ciudadanos convocados por la Associació per a la Recuperació de la Memòria Històrica de Mallorca realizó ayer un recorrido por los lugares más significativos de lo que fue en las calles de Palma el golpe de Estado del 18 de julio de 1936.
Esa ruta por la historia del inicio de la Guerra Civil en Palma, que fue denominada «itinerario por la infamia» por Gaspar Valero, que actuó de portavoz, comenzó en Plaça de Cort, y continuó en la Cruz de los Caídos frente al Palau Reial, Can Brondo (en el bar Bosch), el Gran Hotel, las Ramblas, la antigua prisión de Can Mir (en el cine Augusta) y la Plaça Espanya.
«Este es un homenaje a la gente que defendió la legalidad democrática y que fue terriblemente reprimida; es un itinerario por la infamia, si me permiten la expresión, porque realmente recuerda hechos puntuales», dijo Valero al dirigirse a los manifestantes. Uno de los momentos más emotivos del recorrido se produjo en la Cruz de los Caídos, donde varios manifestantes pegaron etiquetas con los nombres de algunos de los mallorquines que perdieron la vida tras el golpe de Estado franquista contra la legalidad republicana. «Más de mil personas fueron asesinadas impunemente y aquí están los nombres de algunos de ellos», dijo Margalida Capellá, que inició ese acto simbólico. Poco después, los convocantes irrumpieron en aplausos durante unos tres minutos.
La Associació per la Recuperació de la Memòria Històrica de Mallorca nació para equiparar a los dos bandos enfrentados en la Guerra Civil con el objetivo de que no haya vencedores «que se queden con la verdad histórica» y vencidos, «que fueron marginados hasta hoy», según explicó Gaspar Valero.
Por la mañana, Eberhard Grosske, Miquel Àngel Llauger y Marilena Tugores, en representación de Esquerra Unida-Els Verds (EU-EV), taparon la placa que recuerda «a los caídos por Dios» -situada en la cruz frente a la Catedral- con otra que señala «a las víctimas de la Guerra Civil». La formación política también colocó, con motivo de la conmemoración del 70 aniversario del golpe de Estado, placas reivindicativas en Sa Faixina y en el Cementerio de Palma, donde fue ejecutado el ex-alcade Emili Darder.