La comunidad china en Balears se ha asociado por primera vez desde que en la década de los años 60 comenzará a llegar a Mallorca. Según datos que maneja la asociación, la comunidad china residente en las Islas legalizada cuenta con unas 3.500 personas.
El objetivo de la asociación es mantener unidos a los residentes y vivas sus raíces, ayudar a los chinos a integrarse y a conocer las peculiaridades de la cultura de Balears.
El primer objetivo de la misma será demandar ayuda a la Conselleria de Inmigració para hacer una escuela de idiomas china. Asimismo, quieren organizar eventos para dinamizar su vida social, comentó la abogada de la asociación, intérprete de la directiva de la misma, la señora Lingmei Du, esposa del presidente, Zhan Ying Kang.
Asistieron al acto Margalida Ferrando, regidora de Serveis Socials en Cort; Magdalena Contestí, directora general de Cooperació del Govern; Antoni Serra, presidente de s'Institut; Miguel Gutiérrez, comisario de Extranjería; y representantes de la embajada china en Madrid.