El PSM se juega su futuro, y posiblemente el futuro inmediato de la izquierda, en un congreso decisivo que se iniciará esta tarde y que concluirá mañana con la elección de un nuevo secretario general. Los dos aspirantes, Jaume Sansó y Biel Barceló, se han pasado los últimos días buscando votos en las diferentes agrupaciones del partido.
Uno de los dos renunciará a optar al cargo esta misma noche. Una vez que se haya votado la ponencia de estrategia política (la que determinará si el PSM se presenta en solitario a las elecciones y si lanza un nuevo proyecto político, el Bloque), o Vicens o Barceló retirarán su candidatura. El compromiso es que uno integre a partidarios del otro en la nueva ejecutiva.
La ejecutiva que hoy pondrá fin a su mandato, también es fruto de la integración: las corrientes, renovadora y oficialista, alcanzaron un acuerdo. El congreso que se incia esta tarde es asambleario, eso quiere decir que podría acudir cualquiera de sus 1.300 militantes. Bloque o no Bloque. Esa es la gran duda de un congreso que, en principio sólo estaba pensado para aprobar un programa electoral.