M.JUNCOSA
Esquerra Unida Els Verds organizó ayer un marcha a Son Espases Vell para denunciar el «pelotazo urbanístico» de Ajuntament de Palma y Govern balear y reclamar una vez más la perservación de esta finca rústica en la que se construirá el nuevo hospital de referencia Son Dureta II, según afirmó el concejal en Cort, Antoni Esteva.
Un grupo de unos cuarenta ciudadanos participaron en el recorrido desde Palma hasta esta finca rústica de 250.000 metros cuadrados de superficie, no urbanizable, ubicada en las inmediaciones de la carretera de Valldemossa, que todavía mantiene uso agrícola y en la que existen unas casas de valor patrimonial que están catalogadas.
El concejal de Esquerra Unida-Els Verds en el Ajuntament de Palma, quien recordó que su coalición defiende la reforma del actual Son Duerta, denunció que la elección de Son Espases responde a un «pelotazo urbanístico» en el que supuestamente Cort pretende declarar como urbanizable toda la zona desde Palma hasta el futuro hospital, una operación en la que, aseguran, «existen intereses de promotores y constructores» de Balears.