Unió Mallorquina (UM) lanzó ayer un serio aviso, y no el primero, al PP y le dejó solo en la defensa del proyecto de Llei de la Joventut. Este proyecto de ley superó su primer trámite parlamentario pero sólo con los votos del PP. Los partidos de oposición votaron en contra y UM optó por abstenerse.
Miquel Nadal, único representante de UM que ayer asistió al pleno del Parlament, no apoyó las enmiendas a la totalidad que presentó la oposición pero tampoco se desmarcó de las mismas. Tras avanzar algunas de las razones por las que no podía aprobar la propuesta, defendida por la consellera Rosa Puig, anunció una «abstención vigilante y crítica».
Nadal considera que este proyecto ha quedado «obsoleto y desfasado». A su juicio, habría sido más lógico aprobar primero el traspaso de competencias de juventud a los consells. Toda la oposición y UM, lo que Puig negó, dijeron que la norma invade futuras competencias que gestionarán los entes insulares.