NEKANE DOMBLÀS/EFE
El president del Govern, Jaume Matas, aseguró ayer que la
«debilidad» y la poca «capacidad de influencia» de los socialistas
de Balears en el Govern central puede provocar problemas para que
Balears mejore su sistema de financiación. El president reiteró que
es una «mala noticia» que los socialistas de las Islas no sean
capaces de «presionar» ante Madrid para conseguir una mejor
financiación. «Si no arreglamos la financiación no arreglaremos el
Estatut», sentenció el jefe del Ejecutivo. Minutos antes de hacer
estas declaraciones, la portavoz del PSOE en el Parlament, Francina
Armengol, había acusado al president balear de retrasar al máximo
la aprobación del Estatut para evitarse problemas con la dirección
nacional del PP, que en ningún caso apoyaría la propuesta de
Matas.
«Las acusaciones de los socialistas son una maniobra de distracción porque tengo comprometido el apoyo del PP de Balears y del PP nacional para que el Estatut cierre de forma definitiva el modelo de financiación y el déficit histórico con Balears», señaló Matas. Para el president, la propuesta del PP «es clara y concreta» y conminó al PSIB a responder si está de acuerdo o no «y que se deje de maniobras de distracción». El president del Govern y la portavoz de los socialistas en el Parlament repitieron ayer la agria polémica suscitada la pasada semana en torno a la aprobación de la reforma del Estatut d'Autonomia, con variadas propuestas de financiación incluidas.
Armengol apremió al president a renunciar a la inclusión de una cláusula de garantía que determine un porcentaje o una cantidad fija respecto a la cuantía de las inversiones estatales en Balears por considerar que «jurídicamente» este planteamiento es «muy poco conveniente». La portavoz socialista acusó además al PP balear de haber emprendido una «operación de confusión» encaminada a impedir que el Estatut pueda estar aprobado durante esta legislatura en las Cortes, a fin de «quitar un problema» a su líder, Mariano Rajoy.