El crecimiento espectacular del turismo residencial, del turismo individual y de la proliferación de programas de «low cost» (bajo coste), ha provocado un «boom» espectacular en el uso de las nuevas tecnologías para la comercialización de viajes y paquetes turísticos a la medida, al margen del tradicional paquete que organizan los touroperadores españoles y europeos. Tanto es así, que la reserva de viajes vía internet a Balears está creciendo un 20 por ciento anualmente desde el año 2002.
En estos momentos, según fuentes de los propios touroperadores, se están comercializando a Baleares paquetes turísticos, billetes de avión, reservas de alquiler de rent a car, transporte discrecional, oferta de alojamiento hotelera, viviendas vacacionales, turismo rural, «cuyas cifra de volumen de negocio y visitantes no se pueden cuantificar con exactitut en la actualidad, pero los expertos indican que más del 45 por ciento de los visitantes que llegaron a las Islas en 2005, lo hicieron al margen del control del touroperador, gracias al uso de las nuevas tecnologías», indican las citadas fuentes.
Esta nueva dinámica turística y el cambio drástico que se ha producido en los consumidores a la hora de elegir el sistema de contratación, es lo que ha motivado que la Conselleria de Turisme haya iniciado los contactos con la Agrupación de Agencias de Viajes de Balears (Aviba) para modificar el decreto que regula la actividad en las agencias de viajes e introducir los cambios oportunos, «para así solventar cualquier vacío legal que se está produciendo en la actualidad por el uso de las nuevas tecnologías en el ámbito turístico. Pretendemos que haya un acuerdo absoluto con el sector, así como acercar la realidad del mercado a la normativa vigente», explican desde la Conselleria de Turisme.
Para el director general de Ordenación Turística, Josep Aloy, «no se trata de ordenar, sino de garantizar los derechos de los usuarios, contraten o no contraten sus viajes y estancias a las Islas con un portal clásico o vía internet. La prioridad es garantizar al usuario que cuando contrate vía internet va a tener los mismos derechos que aquellos que lo hacen con los canales tradicionales. Y para ello, es vital contar con el consenso del sector para no tener problemas de ningún tipo».