Los servicios de Inspección de la Conselleria de Turisme iniciarán este año una campaña de control sobre toda la oferta hotelera que comercializa servicios de salud y terminales («spa»), al haberse detectado irregularidades en varios establecimientos por no contar ni con licencias ni permisos para ofrecer esta actividad.
En estos, según fuentes de la Conselleria de Turisme, el cuarenta por ciento de la oferta hotelera cuenta con servicios de «spa», en torno a unos 300 establecimientos turísticos de un total de 700 (no se cuentan ni hostales, apartamentos, fondas, ciudades de vacaciones, pensiones y campings) existentes.
«En los últimos cuatro años se ha producido un auténtico boom en la Isla, puesto que gran parte de la oferta hotelera ha optado por adecuar locales específicos para poder contar este tipo de servicios, que son muy demandados por el mercado local, nacional e internacional. Lo que se pretende es evitar que surjan más problemas y que este tipo de instalaciones se adapten a las normativas de seguridad y sanidad vigentes», puntualizan desde Turisme.