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Una mañana espléndida

Un numeroso público se sumó ayer al gran festival con el que se da fin al juego de los Tres Reyes Magos

Tomeu Penya actuó acompañado por los rockeros Géminis.

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El día, que amaneció soleado, ya anunciaba un éxito de participación en el Festival de los Espléndidos Reyes Magos, una cita con la diversión y con la suerte para despedir una nueva edición del juego con el que el periódico Ultima Hora ha repartido un montón de dinero y un coche entre sus lectores durante casi dos meses. Y los buenos augurios se cumplieron. Animados por el sol reluciente y por el aroma de las barbacoas donde se asaron los embutidos y carne de la «torrada», miles y miles de personas se fueron acercando hasta el Pueblo Español, un marco ideal que año tras año abre sus puertas para celebrar esta gran fiesta.

Y mientras el público daba cuenta de la merienda o se tomaba un refresco o la apetecible cañita del domingo por la mañana, los artistas fueron desfilando por los tres escenarios del recinto. Los payasos y unos enormes zancudos del grupo Metamorfosis iban repartiendo caramelos entre los más pequeños, y los niños no tuvieron tiempo de aburrirse entre éstos y los dos castillos hinchables que El Castell dels Menuts instaló junto a la entrada, donde se formó cola desde primera hora de la mañana para no perderse el acontecimiento.

De hecho, fueron muchos los niños y niñas que llegaron junto a sus papás, otros con hermanos adolescentes y también abuelos. Se trata de una fiesta muy familiar con actuaciones para todos los gustos y edades, no es de extrañar que sea una de aquellas ocasiones en las que apetece pasar en familia la jornada dominical. Nada más entrar en el Foro Romano, todo estaba dispuesto. Las brasas, a punto bajo las barbacoas, la merienda servida; los camareros dispuestos a servir refrescos de Coca-Cola y cerveza San Miguel y los artistas, sobre el escenario dándolo todo. En definitiva, fue todo un éxito.

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