El pasado sábado por la mañana, decenas de palmesanos y de visitantes acudieron a la Plaça de Cort para presenciar los diversos actos previstos en la segunda jornada de la Festa de l'Estendard. Cabe recordar que a lo largo de dos jornadas, el 30 y el 31 de diciembre de cada año, la llamada Festa de l'Estendard conmemora la toma de Palma por parte del rey Jaume I y sus tropas el 31 de diciembre de 1229. La celebración de este acontecimiento histórico se remonta a principios del siglo XIV. Su formato actual, con la ofrenda floral arei en Jaume el día 30 en la Plaça d'Espanya, y con la colocación del Estendard en la Plaça de Cort un día después, data del siglo XX.
A las 10.15 horas, los concejales del Consistorio colocaron el Estendard Reial en el centro de la plaza, en donde también se colocó la cimera del rey Martí, mientras la Banda de Música Municipal interpretaba el himno de Mallorca, 'La Balanguera'. Después, la alcaldesa de Palma, la popular Catalina Cirer, y el resto de ediles se dirigieron a la Catedral, precedidos por los Tamborers de la Sala, los Cossiers, los Cavallets de la Escola de Música i Danses de Mallorca, los jinetes de la Confraria Balear de Cavallers de Sant Jordi y los Ministrils del Consell.A las 10.30 horas empezó la misa concelebrada, presidida por el obispo de Mallorca, monseñor Jesús Murgui. La homilía corrió a cargo de mosén Jordi Gayà. Como es tradición, los Cossiers y los Cavallets danzaron en el interior del templo. Al acto religioso asistieron, entre otros, el presidente del Govern, Jaume Matas; el presidente del Parlament, Pere Rotger, el vicepresidente del Consell, Miquel Nadal, y otras destacadas autoridades civiles y militares. Acabada la misa, los representantes del Consistorio regresaron a la Plaça de Cort y retiraron el Estendard. Por último, tuvo lugar la tradicional representación de 'La Colcada', de Pere d'Alcàntara Penya, a cargo de Miquelina Lladó y de las alumnas de la Escola de Música i Danses de Mallorca.