Es la noche más esperada del año. En ella se hace un balance de lo más positivo y negativo que nos ha deparado 2005 y posteriormente se realiza una serie de ritos para que la suerte nos toque el próximo año. Pero, aunque todas las acciones van enfocada a un mismo objetivo, que no es otro que el de ahuyentar a los malos espíritus y conseguir buena fortuna, las costumbres de esta velada cambian de un país a otro.
Inglaterra. Para despedir el año, en Londres se concentran en lugares tan emblemáticos como Trafalgar Square, Picadilly Circus o ante el Big Ben. A medianoche, los ingleses entrelazan sus brazos y cantan la antigua canción «Auld Lang Syne».
Escocia. En algunas poblaciones escocesas, los ciudadanos prenden fuego a un barril y lo hacen rodar por las calles para dar la bienvenida al año. También existe la tradición llamada «first footing», según la que la primera persona que entre en la casa el primer día del año determina la suerte de la familia durante los próximos 12 meses. Para tener fortuna debe ser un hombre moreno y guapo.
Francia. Muchos parisinos acuden a los Campos Elíseos con una botella de champán y allí festejan el final del año. La tradición es besarse y abrazarse bajo una rama de muérdago a medianoche.
Italia. Los italianos inician la «notte di Capodanno», como la llaman, con una típica cena en el que las lentejas son un plato imprescindible si se quiere tener un buen año. En Roma y Nápoles es costumbre lanzar objetos viejos por la ventana para romper con el pasado e iniciar una nueva etapa.
Grecia. De postre, los griegos comen el roscón de San Basilio, que contiene una moneda. Al que le toca, tendrá un año muy próspero.
Alemania. Los alemanes brindan en honor a San Silvestre. Además, es tradición dejarse algo en el plato de lo que se ha comido esa noche como símbolo de despensa bien surtida para el año que viene.
Austria. Los vieneses lo celebran al son del típico Vals de Año Nuevo y el Concierto de Strauss que la Filarmónica de Viena ofrece cada 1 de enero.
Dinamarca. Los daneses rompen platos delante de las casas de sus amigos para demostrarles lo mucho que les aprecian.
Rusia. Para los niños rusos, Nochevieja viene a ser como la Navidad para nosotros. El Abuelo del Hielo, emulando a Papa Noël, reparte regalos y dulces. Para conseguir estos presentes, los chavales bailan alrededor del árbol navideño y recitan poemas.
Estados Unidos. El momento cumbre en el Times Square de Nueva York es la bajada de la famosa bola de cristal, que marca el comienzo de los fuegos artificiales tras las doce campanadas.
Argentina. Los argentinos hacen muñecos de madera, tela y papel para después quemarlos. Es un rito purificador y una forma de deshacerse de todo lo malo de este año que se acaba.
México. Acostumbran a barrer la casa esa noche para que el nuevo año sólo traiga suerte «limpia». Pasearse con una maleta durante esa velada favorecerá los viajes.
China. El Año Nuevo chino llega en febrero. La gente limpia sus casas para eliminar cualquier resto de mala suerte. En las calles hay bailes de dragones e infinidad de fuegos artificiales y petardos para alejar los malos espíritus.
Japón. Un total de 108 veces suenan las campanas de los templos japoneses. Cada campanada hace referencia a un deseo terrenal que hay que mantener alejado.
Samantha Coquillat