La diputada del Grupo Socialista, Rosamaria Alberdi, acusó ayer a la Conselleria d'Educació de «continuas injerencias» en el funcionamiento del Conservatori Superior de Música de Balears que han derivado en un «caos organizativo y en la pérdida de prestigio de la institución».
Albertid denunció que alumnos y profesores del Conservatori han recibido «presiones» y «coacciones diversas» por haber apoyado las reivindicaciones protagonizadas por determinados profesores ante el conflicto que enfrenta a los docentes con la dirección.
Por ello, la diputada formulará próximamente diversas preguntas parlamentarias sobre esta cuestión al conseller d'Educació, Francesc Fiol, para aclarar la situación. La diputada detalló que las injerencias se iniciaron en 2004, estableciendo un reglamento menos participativo. Tiempo después, detalló, se constituyó una comisión formada por personas afines a la Conselleria y excluyendo a los responsables del Conservatori para planificar la nueva plantilla del centro.