Los residentes de la Llar dels Ancians salieron ayer de paseo para visitar algunos de los belenes que durante estas fechas acoge Ciutat. El recorrido, organizado por S'Institut, se inició en la plaza de España, donde los voluntarios se encontraron con los participantes para emprender el camino. De allí se dirigieron a la calle Sant Miquel para llegar a la Plaça Major, donde los residentes pudieron contemplar los distintos nacimientos que se pueden adquirir en el mercado que hay en dicha plaza. Incluso algunos de ellos adquirieron algunos adornos para sus habitaciones.
Ya en Cort, disfrutaron con la belleza del belén de los oficios que se encuentra en el vestíbulo. Un total de 300 piezas componen un completo belén en el que algunas escenas tienen «vida» con la ayuda de un mecanismo, como la cascada de agua, donde los pescadores tiran las redes y los llaüts y otras embarcaciones, algunas de vela latina, navegan por las transparentes aguas. Y como en todo belén, no podía faltar, además de los tres Reyes Magos, el establo que acoge el nacimiento del niño Jesús, donde hasta el ángel va vestido con el traje típico mallorquín.
El president de s'Institut, Toni Serra; la directora del àrea de Recursos Assistencials, Maria Cifre, y el jefe de servicio del voluntariado, Xavier Torrens, acompañaron a los residentes.
El grupo finalizó el recorrido con una
merienda.
S. Coquillat