Las 64 casetas de la Plaça Major y las 68 de la Plaça d'Espanya están a punto de montarse en su totalidad y mostrar una gran cantidad de género para estas próximas fiestas de Navidad. Ayer por la mañana, los «caseteros» trabajaban afanosamente para acabar cuanto antes. «Las casetas deberían haber estado terminadas a mitad de noviembre, pero este año el Ayuntamiento se ha dormido», dijo un comerciante de la Plaça Major. En la Plaça d'Espanya también había malestar, sobre todo porque hasta el viernes no habían tenido luz eléctrica.
De todas formas, ayer había en ambos lugares casetas abiertas al público mientras otras estaban aún por terminar.
R.D.