El equipo dirigido por el rector Avel·lí Blasco propondrá el cese de Biel Mesquida como director de Ediciones de la UIB. No obstante, según confirmaron ayer fuentes del rectorado, «por ahora, no se abrirá ningún expediente para averiguar la exactitud de las graves acusaciones que pesan sobre el escritor». Así, la «reestructuración» consistirá en el nombramiento de una nueva directora, en sustitución del dimisionario Jaume Rosselló; la externalización del servicio; y el desplazamiento de tres trabajadores más de Publicaciones hacia otras áreas. La propuesta del rectorado tendrá que ser ratificada por el Consell de Govern de la UIB en una reunión que se celebrará día 16 de diciembre. Parece que Mesquida será desplazado a un vicerrectorado que lo ha protegido durante el proceso.
Las fuentes del rectorado indicaron ayer que la «reestructuración» planeada exige un cambio en el Reglamento del Servicio de Publicaciones, que tiene que ser sancionado por el mencionado órgano de dirección. Las acusaciones que pesan sobre Biel Mesquida y otros trabajadores abarcan un amplio espectro de presuntas faltas muy graves cometidas, que van desde la suplantación en el control de asistencia al absentismo laboral. Diversas fuentes han explicado que, en el informe se pide la investigación de un supuesto caso de «mobbing» contra uno de los integrantes de la dirección del Servicio de Publicaciones.
Asimismo, se menciona la utilización como secretaría personal de Mesquida del trabajador que tenía asignada la responsabilidad sobre la producción del Centro, lo que era usada para justificar el incumplimiento de las tareas que, normativamente, tenía que llevar a término. Finalmente, el informe incluye una presunta facturación de gastos personales a cargo de la UIB. Se trataría, según las fuentes, de billetes de viajes en recitales, presentaciones o ceremonias de entrega de premios. La inclusión de todas estas imputaciones en el informe no fue desmentido ayer por las mencionadas fuentes del rectorado.