El hotel Punta Negra, convertido en una auténtica fortaleza. Más de 300 agentes de seguridad rodean el complejo hotelero para garantizar que la reunión preparatoria de la Alianza de Civilizaciones, auspiciada por el presidente del Gobierno y patrocinada por las Naciones Unidas, se celebre sin ningún tipo de contratiempo. El recinto hotelero ha quedado aislado por la Policía y es preciso pasar un estricto control de seguridad para poder acceder al recinto.
Los periodistas no tienen permitida la entrada y para facilitarles su trabajo se ha montado una carpa en los aledaños del hotel. A pesar del gran número de profesionales de los medios de comunicación que se han acreditado para poder informar de las reuniones, en el recinto hubo una gran tranquilidad durante todo el día.
Responsables de la organización informaron de que la mayoría de los participantes en la reunión lleva ya varios días en Mallorca. No es el caso del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que llegó ayer mismo a la Isla con el tiempo justo para poder cenar con Matas y trasladarse después al hotel Mardavall, situado muy cerca del hotel Punta Negra, donde se celebra la cumbre. El primer ministro turco, Recep Tayyib Erdogan, también llegó ayer a la Isla a las 11 de la noche.