Veintinueve presidentes de asociaciones sectoriales o territoriales federadas a la Petita i Mitjana Empresa de Mallorca, PIMEM, han firmado un documento en el que solicitan la dimisión del presidente de la federación, Francisco Horrach, de la vicepresidenta, Margarita Dahlberg, y de la tesorera, Manela Camps, quienes cuentan con el apoyo de la gran mayoría del Comité Ejecutivo y de al menos las siete asociaciones a las que representan.
Horrach, quien atribuye la crisis a la pérdida de poder de las sectoriales de comercio (Pimeco) y de industria, afirma que no piensa dimitir y anuncia la convocatoria de una junta directiva extraordinaria para reconducir la situación.
Según reza el documento firmado por las asociaciones opositoras, «en veinte meses se ha demostrado que el nombramiento de tanto el presidente, de la vicepresidenta primera y de la tesorera durante la controvertida Asamblea General Extraordinaria celebrada en febrero de 2004, así como de la secretaria general en la Asamblea General Ordinaria de abril del mismo año, fueron un grave error que en estos momentos está a punto de costarnos a todos que nuestra Federación se hunda».