La dirección federal del PSOE lanzó ayer un mensaje muy claro. A través de su secretario de Política Municipal, Àlvaro Cuesta (responsable de coordinación electoral) atajó cualquier intento de lanzar nombres para encabezar las listas electorales en 2007.
«Nadie está autorizado para postularse, ni en los ayuntamientos ni en las comunidades autónomas», dijo Cuesta en una pausa de la reunión del Consell de Política Municipal del PSIB. Previamente había trasladado el mismo mensaje a los cargos del partido.
Cuesta, flanqueado por Francesc Antich y Francina Armengol, afirmó que Palma es una «prioridad electoral» de cara a los comicios de 2007. Explicó que un 30 por ciento del electorado potencialmente socialista no votó en la última convocatoria municipal, y destacó que su partido trabaja para captar estos apoyos con la voluntad de ofrecer «una ciudad apasionante».
Sobre la celebración o no de «primarias» para decidir mediante consulta interna los candidatos socialistas, señaló que la Ejecutiva federal decidirá si en algunas comunidades autónomas es mejor no celebralas.
A la reunión del Consell de Política Municipal asistieron militantes que, directa o indirectamente, se han ido postulando como posibles candidatos a la Alcaldía de Palma. El actual portavoz, Antoni Roig, no será candidato.