Empiezan a estar agotados, pero merece la pena, tal y como aseguran muchos de los participantes en la sexta edición de la Balearikus Party, que este año se lleva a cabo en el recinto de Fires i Congressos de Palma. Duermen poco, comen menos y su única energía diaria es la de estar conectados a la red una media de 20 horas seguidas, sólo interrumpidas por breves momentos de descanso en una sala habilitada para ello.
Los inscritos son aves nocturnas, y por ello, cuando mayor movimiento hay es durante la madrugada, después a dormir un poco, ducha, una comida rápida y otra vez a teclear sin parar. Algunos de ellos, sobre todo los que vienen de Eivissa, Menorca y Barcelona, duermen en tiendas de campañas que han colocado en una sala contigua.
Antonia Rivero es de Palma, pero también se ha llevado su tienda de campaña para aprovechar el máximo tiempo posible. Es una de las pocas mujeres que participan en este encuentro de internautas. Asegura que no se siente un bicho raro, «estoy acostumbrada, además, cada vez somos más». Y es que de los 500 inscritos, sólo 30 son chicas. Antonia dice que es una oportunidad única porque, por el módico precio de 60 euros, se les permite tener una conexión de 600 megabytes. Para Rafa Morey este es el principal aliciente, ya que todo son comodidades para poder jugar, descargar música y películas y chatear. Los internautas han apostado por la estética externa de su PC, así, abundan las luces de néon y los cables brillantes.
S. Coquillat