La cena que clausuró ayer los actos del centenario del Fomento de Turismo en Son Amar estuvo marcada por la ausencia de autoridades y relevantes miembros de la junta directiva de la institución anfitriona, en una larga y tediosa noche de intercambio de premios. Velada en la que, una vez más, el todavía presidente de la institución, Miquel Vicens, perdió los papeles en un discurso crítico con la gestión de diferentes administraciones de Balears.
La desafortunada intervención se cebó especialmente con la alcaldesa, de Palma, Catalina Cirer. Las razones: no financiar la obra de Miquel Barceló en la Seu y conflictos con el Cercle de Belles Arts.
El estilo ácido que mantiene Vicens desde hace dos años ha dividido a la junta directiva del Fomento y puesto en jaque la independencia de esta institución.
Ayer, ningún representante de la dirección de este diario acudió a la velada, que declinó la distinción concedida a las empresas colaboradoras del centenario del Fomento, aunque sí estuvieron presentes redactores para cubrir la información.
Por contra, en la parte positiva de la noche, los más aplaudidos de la velada fueron Miquel Alemany, antiguo trabajador del Fomento, premiado con la medalla de oro especial; y la viuda de Eak Tai Ahn, el que fuera primer director de la Orquesta Sinfónica de Mallorca, que recibió la medalla de oro a título póstumo. Asimismo destacar a nuestros compañeros, los periodistas Juan Luis Ruiz Collado y Mario Morales, que recibieron el Molino de Plata con una gran ovación.