La Confereación de Asociaciones Empresariales de Balears y la Federación Empresarial de Transportes manifestaron ayer su rechazo «rotundo» al proyecto de creación de un impuesto sobre los «rent a car». «Ni la sanidad ni el medio ambiente deben ser sufragados con impuestos adicionales sobre nuestros clientes», dijo el presidente de CAEB, Josep Oliver. «Es equivocado que, una vez más, los governs utilicen los impuestos con ligereza, ya que pueden incidir de forma negativa sobre la competitividad», afirmó Josep Oliver.
La CAEB y la Federación de Transportes expresaron por otra parte su malestar por la forma en que el Govern balear anunció la medida, ya que no fueron consultados de forma previa. El presidente de Baleval, Ramon Pujol, afirmó ayer al término de la asamblea que la patronal celebró en la sede de CAEBN que la práctica totalidad del sector rechaza el nuevo impuesto, incluso los asociados a Aevab. «Ha habido un clamor popular contra Ramon Reus -presidente de Aevab- porque creen que les han traicionado», afirmó. «Se trata de una ecotasa inasumible por el sector, cinco veces más cara de la que puso el Pacte de Progrés y que sólo gravaría a un 5 o un 10 por ciento de los turistas», añadió.
Ramon Reus, presidente de Aevab, afirmó que el impuesto permitía reducir la flota de coches de alquiler en las Islas, limitar la exportación de vehículos y elevar los precios. «La idea consiste en crear un registro de entradas y salidas de vehículos en Balears y gravar mediante estimación directa a los que salgan antes de un año, con unos 5 o 6 euros por día. El resto pagaríamos mucho menos por un sistema de módulos», explicó Reus, quien consideró que todavía predomina el desconocimiento entre las empresas del sector.