Rosa Estaràs Ferragut nació el 21 de octubre de 1965, es decir, hoy cumple 40 años. Cualquiera diría que la vicepresidenta del Govern lleva media vida en política, y tampoco sería una exageración, pero lo cierto es que Estaràs accedió a un cargo público relevante con apenas 27 años, aunque sus primeros pasos fueron como concejala en Valldemossa. En 1993, la salida de Francesc Gilet de la Conselleria adjunta a la Presidència -donde Estarás comenzó como administrativa- supuso la entrada de Estarás en el Govern de Cañellas. Antes de ser fichada como consellera, Estaràs era directora general, pero Cañellas se fijó en ella y la colocó prácticamente como «número dos» del Govern meses antes de que entrasen en el gabinete autonómico Matas, Reus, Flaquer, Cirer y el ya desaparecido Bartomeu Cabrer. Poco tiempo después de ser elegida consellera, Cañellas aupó a Estaràs hasta la Vicepresidencia del Govern. Estaràs pudo ser presidenta en el verano de 1995, pero prefirió seguir en un segundo plano junto a Cristòfol Soler, el sustituto de Cañellas. Estaràs siguió como vicepresidenta hasta que Matas accedió a la Presidència. Estarás pagó su fidelidad a Soler y siguió en el Govern, pero sólo como consellera de Presidència hasta 1999. La hoy vicepresidenta pasó unos meses en la oposición junto a Matas, pero abandonó el Parlament en el año 2000 para ser la candidata del PP en las generales. Estaràs inició su carrera política en Madrid y fue elegida portavoz adjunta del PP en el Congreso. En 2003, Matas regresó a Palma y se trajó a Estaràs, que fue nombrada de nuevo vicepresidenta.