EFE-J.M.
El presidente del Govern, Jaume Matas, dijo ayer que no tiene
ninguna duda de que el proyecto de Estatut de Catalunya «ha abierto
un gran cisma en el PSOE». No obstante, Jaume Matas responderá a la
invitación realizada por Pasqual Maragall, presidente de Catalunya,
para que todos los presidentes autonómicos viajen a Barcelona para
conocer a fondo la reforma estatutaria. «Las relaciones con
Catalunya son cordiales y de normalidad absoluta», resaltó Joan
Flaquer, portavoz del Govern.
Matas se mostró convencido de que «pública y privadamente más de un líder socialista está absolutamente sorprendido de que este proyecto de Estatut haya podido llegar con el apoyo del PSOE, aunque sea el de Catalunya, al Congreso».
Preguntado sobre la posibilidad de que el PP y el PSOE votaran juntos contra el Estatuto catalán, señaló que el presidente del PP, Mariano Rajoy, siempre va a anteponer los intereses de España por delante de cualquier otro interés.
«Después de que el propio presidente del partido haya hecho de una forma reiterada esta propuesta al propio presidente del Gobierno, incluso con el compromiso de una reunión que hubo en Moncloa donde parecía que se aceptaba esta propuesta de aceptar el pacto constitucional, la respuesta ha sido recibir una callada por respuesta, casi una patada», comentó Matas.
«No creo -añadió el president del Govern- que en estos momentos Rodríguez Zapatero estuviera en condiciones de exigir esta colaboración a Rajoy».
No obstante, insistió en que está convencido de que Rajoy «sí lo haría», porque, reiteró, «siempre interpondrá los intereses de España por delante de los del partido».