«¿Le parece bien que la lengua catalana tenga, junto a la castellana, el carácter de idioma oficial en las Illes Balears»? Esta es una de las 14 preguntas que el Govern ha incluido en el cuestionario que está remitiendo a las diferentes entidades, entre ellas las casas baleares asentadas en el exterior, para que aporten sus sugerencias para la reforma del Estatut. Nunca, ni los políticos ni el llamado «comité de sabios» se habían planteado la posibilidad de alterar el reconocimiento del catalán como lengua oficial.
La mayoría de las preguntas que incluye el Govern (y que van precedidas de una carta de presentación de la vicepresidenta del Ejecutivo, Rosa Estaràs) se refieren a cuestiones que, en principio, aceptaría incluir el PP en la reforma del Estatut, como la posibilidad de asumir competencias en extranjería; la potestad presidencial para disolver el Parlament y convocar elecciones anticipadas; la necesidad de un Régimen Especial o la conveniencia de contar con un régimen fiscal diferenciado.
Además de la pregunta referida al catalán y su carácter oficial, hay otra de clara intencionalidad política: si la actividad de los consells se ejerce de forma coordinada.