La Associació Illes Balears d'Adopcions (AIBA) recibe diariamente, desde hace dos semanas, unas 4 o 5 llamadas solicitando información para la adopción de un niño o una niña por parte de parejas del mismo sexo, «cuando hasta ahora veníamos recibiendo unas seis o siete al mes».
El presidente de AIBA, Ramon Rotger, reconoce que la luz verde dada a los matrimonios homosexuales y a las adopciones por parte de éstos «ha movilizado a muchas personas que han dado el paso de solicitar la información sobre los trámites y posibilidades de adoptar una vez casadas».
Pero las parejas del mismo sexo no pueden adoptar en cualquier país del mundo, pues algunos, como China o Filipinas, lo prohiben tajantemente. Otros, como Perú o Bolivia, «exigen a estas parejas entre 3 y 5 años de convivencia previa a la solicitud de adopción» y algunos «limitan las adopciones a que los demandantes sean un matrimonio católico».
El presidente de la asociación reconoció el apoyo de esta entidad a las adopciones por parte de estas parejas, que podrán adoptar o no en función de su capacidad y preparación, «como todas las demás». Y es que, recordó Rotger, antes de aceptarse un trámite de adopción, nacional o internacional, los solicitantes deben recibir el denominado certificado de idoneidad, que supone haber pasado todas las pruebas y entrevistas a las que personas expertas someten a los aspirantes para determinar si están preparados para adoptar a un menor.
En este sentido, resaltó que Balears es la tercera Comunidad, sólo por detrás de Navarra y Cataluña, en cuanto a tasa de hogares que reciben este certificado de idoneidad por cada 100.000 habitantes. Así, explicó, en 2004 hubo en las Islas 143 hogares aptos, que sobre una población de 100.000 habitantes supone una tasa del 49,2%, y sólo tres no lo fueron, que indica una tasa del 1%.
En cuanto a adopciones finalizadas, en 2004 se produjeron en las Islas 105 internacionales y 48 nacionales. Los principales países de origen son Rusia, China y Colombia y en cuarto lugar «está ganando mucho terreno Etiopía», afirmó Rotger. En estos momentos, añadió, «hay en marcha unos cuatro expedientes en este país, pero tendrán que esperar, ya que el país está prácticamente cerrado a las adopciones internacionales por el exceso de demanda».
El presidente de la AIBA subrayó otra novedad importante, en este caso referidas a las adopciones por personas solas, que a partir de ahora ya no tendrán la obligación de registrar un padre o una madre ficticia a la hora de inscribir al menos en el Registro Civil.
La nueva normativa, aprobada el pasado día 8 por el Consejo de Ministros, modifica el artículo 191 de la Ley de Registro Civil, vigente desde 1958, y se podrá aplicar a las inscripciones ya practicadas.