La Oficina del Defensor del Menor atendió el año pasado un total de 64 casos de maltrato infantil, según consta en el informe que ayer analizó el Consell de Govern. De los 426 casos que atendió esta Oficina, la mayor parte, el 43,5 por ciento, correspondieron a actuaciones en materia de integración social y protección jurídica, entre las que destacan por su volumen las actuaciones en situaciones de riesgo y la adopción de figuras jurídicas de protección.
En el apartado de educación y cultura, la Oficina intervino en 72 casos -21 de ellos para facilitar la escolarización- mientras que, en materia de salud, las intervenciones fueron 109. Es en este apartado donde se sitúan los 64 casos de maltrato.
El informe incluye una serie de sugerencias de actuación para las distintas administraciones, entre las que figura la necesidad de que se realice un mayor esfuerzo para respetar verdaderamente el interés superior del menor. El informe considera necesario que se establezca una regulación normativa de las condiciones mínimas de acogida residencial en las Islas. En este aspecto considera que, si se ha de hacer un retorno del menor, éste debe hacerse en las mejores condiciones posible.Uno de los aspectos en los que más se detiene el informe es el referido abullying o acoso escolar. La Oficina del Defensor del Menor alerta de la creciente implantación de este fenómeno y propone que se realice un estudio en profundidad «como guía preventiva dirigida a los profesores, padres y alumnos».