El polifacético Joan Carles Bestard, quien da vida a la carismática Madò Pereta, salta sobre el escenario con «Mucho ruido y pocas nueces», una obra que recorrerá todo el Estado español. Rafael Oliver producciones y producciones de teatro de la Fundación Teatro Principal llevan a cabo de manera cómica y entretenida la obra de William Shakespeare. Dos historias de amor paralelas que tendrá a Joan Carles Bestard como el gobernador, despertando fuertes notas de humor y cambiando de registro a mitad de la obra. Sin duda, un nuevo reto para este actor que en temporada escolar combina su amor y vocación por el teatro con su labor docente. Este verano resultará más duro porque tendrá que combinar los compromisos de Madò Pereta con las representaciones de «Mucho ruido y pocas nueces». Una obra que ha tenido una excelente acogida y mejor critica en sus primeras interpretaciones. Comenzaron el pasado 17 de junio en Can Ventossa de Eivissa, el día 19 estuvieron en el teatro barcelonés de Zorrilla, llenando el aforo durante las funciones y despertando el interés de la empresa Focus. La próxima cita es del 7 al 10 de este mes en El Patio de la Misericòrdia, un escenario al aire libre que tendrá a doce excelentes actores ante el público.
Y es que, muchos conocen a Madò Pereta, un personaje que existe desde hace 4 años y ha conquistado el cariño de muchos mallorquines, pero en realidad no conocemos a quien realmente hace latir ese querido corazón. Se trata de Joan Carles Bestard, una persona que se confiesa tímida, que odia la prepotencia y la soberbia. Asegura no ser manioso, pero se santigua, y no sabe por qué, tres veces antes de cada función. Tampoco se le ocurre pasar por debajo de una escalera, ni quiere que se le cruce un gato negro en su camino. En fin, que va a ser que sí.
Joan Carles huye del sol, es diabético y reconoce que «me tendría que cuidar más, cosa que no hago. Me encanta la comida casera». El tiempo libre le gusta compartirlo paseando, charlando con los amigos, saliendo de cenas tranquilas, escuchando música o al cine. Pero especialmente, tiene una afición algo cara, «viajar me entusiasma, tengo pendiente varios destinos, entre ellos Egipto». «Los fines de semana que puedo me escapo a Londres y en plan maratón veo varias funciones de teatro». Con Madò Pereta ha sorprendido a muchos, el personaje le da muchas alegrías, pero también le ha dado algún disgusto, pues existe mucha envidia en el mundo artístico.
Julián Aguirre