Balears será la única comunidad autónoma en la que el gasto en pensiones no será superior al de la recaudación por cotizaciones, según se recoge en un estudio elaborado por el Instituto de Estudios Fiscales.
En cambio en el resto de las comunidades, siempre según el estudio, esta tendencia se invertiría lo que generaría déficit a la Seguridad Social a partir de 2010.
La territorialización de la «caja única» de la Seguridad Social y de las pensiones contributivas supone un riesgo para la sostenibilidad del modelo, debido a la diferencia en algunas regiones entre prestaciones y recaudación, según el estudio.
El informe destaca el elevado grado de saneamiento presupuestario de la Seguridad Social, gracias al mayor aumento de las cotizaciones que de las prestaciones contributivas, y augura que se prolongará hasta 2015, aunque a partir de ese año el impacto del envejecimiento de la población provocaría déficit, «de no adaptarse nuevas medidas», especialmente entre 2020 y 2050. Sin embargo, explica que el análisis regional muestra unas diferencias muy importantes entre comunidades en ingresos y gastos.