La Fundación Deixalles, a través de su Gabinete de Orientación Laboral (GOL), atendió el año pasado a 532 personas en riesgo o situación de exclusión social, el 52,86% de las cuales consiguió la inserción laboral con un contrato de trabajo. El obispo de Mallorca, Jesús Murgui, y el presidente de la Pequeña y Mediana Empresa de la Isla (PIMEM), Francesc Horrach, visitaron ayer las instalaciones de la Fundación Deixalles, que impulsa diversas campañas relacionadas con el medio ambiente, como «No les llancis», «Reis de vidre» y «Mallorca recicla».
Según la memoria del año pasado, la mayor parte de los usuarios fueron atendidos por el GOL de Palma (395), aunque el servicio también actúa en Sóller, Felanitx y Artá. Esta entidad sin ánimo de lucro, impulsada por PIMEM y la Delegación de Acción Social del Obispado de Mallorca, tiene como principal objetivo la inserción sociolaboral de personas desfavorecidas socialmente. Para conseguirlo, se realiza un itinerario formativo y práctico, adecuado a cada una de las personas beneficiarias.
Así, la Fundación se encarga de facilitar la inserción sociolaboral de personas desfavorecidas o en riesgo de exclusión mediante la realización de actividades respetuosas con el medio ambiente.