Las tradicionales banderas de oración budistas ya están en el techo de Mallorca. Las cinco líneas de colores ondean desde ayer por la mañana en el Peñasco de Migdia, desde donde elevan al cielo sus plegarias.
Los expedicionarios al Everest -José María Àlvarez «Jopela», Joan Antoni Olivieri «Oli» y los dos Tolos (Quetglas y Calafat)- ascendieron ayer por la mañana al Peñasco de Migdia para cumplir con una promesa que hicieron antes de abandonar Nepal: dar gracias por volver sanos y salvos de su aventura a la cordillera del Himalaya, además de alzar sus plegarias para pedir suerte en un próximo intento de hacer cumbre en la gran montaña del Himalaya.
A la ceremonia asistieron numerosos amigos y familiares de los escaladores, además de representantes de las entidades patrocinadoras de la expedición «Mallorca a dalt de tot. Everest 2005», entre las que se encontraban el Consell de Mallorca, GESA, «Sa Nostra» y el Grupo Serra.
El director insular de Información Turística del Consell, Josep Bestard; el director general de GESA, Jaume Reguart y su jefa de comunicación, Maria Magdalena Frau, acompañaron a los expedicionarios mallorquines, a los que manifestaron una vez más su apoyo de cara a un segundo intento de llegar a la cima de la montaña más alta de la Tierra: el Everest.
Jopela, «Oli» y los dos Tolos colocaron las cinco líneas de banderas de colores, tal y como lo habían aprendido en la ceremonia que se hizo en el Campo Base días después de su llegada.
Las banderas se despliegan de manera radial y cada una lleva inscrita oraciones budistas que al ser ondeadas por el viento suben hasta el cielo.
Los cinco colores (azul, blanco, rojo, amarillo y verde) representan el cielo, las nubes, las montañas, la tierra y el agua. Las banderas de oración son una tradición muy arraigada y tienen el sentido de ser un tipo de oración permanente en recuerdo de los vivos o de los muertos, además de servir para pedir suerte en cualquier tipo de iniciativa o viaje.Joan Carles Palos