Más de lo mismo hasta el 2007 y ninguna remodelación en el Ejecutivo. Ese es el mensaje que trasladó ayer el president Jaume Matas, al valorar sus dos años al frente del Ejecutivo autónomo. Lo hizo como colofón de lo que el Govern había bautizado como «reunión de objetivos» y que terminó convirtiéndose en una declaración complaciente sobre la gestión del Ejecutivo que preside y en la constatación de que «los grandes pilares de esta legislatura ya están puestos» y ahora sólo quede concretar y materializar los proyectos.
El president hizo estas consideraciones en la finca es Gabellí Petit, en Campanet, adquirida hace una semana por el Ejecutivo y en la que se ubican ses Fonts Ufanes. Allí se reunió Matas con la totalidad de su Gabinete y cargos de la Administración autonómica y del Partido Popular.
En su rueda de prensa -acompañado de Rosa Estaràs y Joan Flaquer-, celebrada bajo un encinar, el president admitió que no se iban a plantear nuevos objetivos, más allá del envío de leyes al Parlament, y se congratuló de que se vayan cumpliendo las previsiones de la legislatura que definió como la de «las realizaciones y la estabilidad institucional». Ultima Hora tiene constancia fehaciente de que Matas pidió expresamente a sus consellers que no abrieran «nuevos frentes» y que se adapten al guión.