Chenoa y su amiga Geno se bañaban ayer por la tarde frente a la costa andritxola, camino de Sant Elm. La 'garganta profunda' que nos llamó poniéndonos tras la pista, nos dijo que estaba en top less y acompañada de un caballero. Era, por tanto, necesario el «amatojamiento», es decir, había que localizarla y luego buscarse un lugar desde donde atizar. Si se conseguían, podían ser una de la fotos del verano, por tanto, el trabajo requería cautela.
Efectivamente, traslalado al lugar, vi a Chenoa. No estaba en top less y... bueno, de espaldas a ella estaba alguien, torso descubierto, larga melena bajo un sombrero de cow boy blanco. ¿Será él...? Había que armarse de paciencia y esperar, eso sí, de vez en cuando tirito va, tirito viene, más que nada, por si había baño o besitos, tener con que aderezar el reportaje. Al rato, Chenoa se dirigió al mar. El del sombrero, al ponerse de pie, dejó claro que no era chico sino chica. ¿Quién...?
Todo funcionaba bien hasta que alguien les dijo que desde la otra parte un periodista les estaba haciendo fotos. Siempre pasa lo mismo. Los fans, sobre todo, se ponen de lado de su ídolo y lo defienden como sea. Chenoa y su amiga miraron hacia donde estaba, se pusieron de pie, levantaron la mano y: «¡Sácanos guapas, al menos!», gritó Chenoa.
Pedro Prieto