Joan Carles Palos (Everest)
La reunión tenía que celebrarse el próximo miércoles, pero los
jefes de las expediciones comerciales precipitaron ayer un
encuentro en el que intentaron imponer su ritmo al resto de grupos.
Aunque las previsiones meteorológicas son adversas a cualquier
intento de coronar la cumbre, «el que paga manda» es la norma que
acabó imponiéndose sobre el espíritu alpino. Estamos a día 23 de
mayo y todavía nadie ha conseguido hacer cima en el Everest por la
ruta sur.
Un hecho insólito que genera una gran preocupación entre las principales empresas (Alpine Ascents International, Adventure Consultants, Mountain Madness, y Asian Trekking, entre otros), las cuales dieron a conocer su estrategia de ascenso para los próximos días y, al mismo tiempo, promovieron una colecta de cuerdas, estacas de hielo, pernos de hielo y roca para equipar desde la «Balconada» hasta el Peldaño Hillary, sobre la carena final en los últimos y decisivos 850 metros de desnivel.
De entrada, cada compañía aportaría un número indeterminado de sherpas que subirían al campo II el día 26. De confirmarse una hipotética ventana entre el 29 y el 31, los sherpas recibirían la orden de abrir camino desde el Cuello Sur hasta la cima y, al mismo tiempo, empezarían a montar las cuerdas fijas para facilitar el paso a los clientes, algunos de los cuales han pagado cerca de 70.000 dólares por tocar el cielo con un dedo desde el techo del mundo.