Las previsiones meteorológicas han obligado a aplazar unos días la posibilidad de hacer cumbre. La estrategia final se cierra ahora en torno a seis días claves: entre el 25 y el 30 de mayo. La última palabra la tendrá el tiempo, él decidirá. El equipo de escaladores integrado por Joan Olivieri «Oli», Tolo Calafat y Tolo Quetglas ya vuelven a estar en el campo base del Everest, después de tres jornadas de descanso en Lobuche. En el mejor de los casos -que de una manera repentina se abriera la tan deseada «ventana»-, el domingo empezaría la ascensión con el objetivo de hacer cumbre el miércoles.
Pero eso sólo es un supuesto, ya que los reportweather
(previsiones) de los próximos dos días serán decisivos.
Las condiciones meteorológicas actuales son poco propicias para
afrontar con garantías cualquier intento de hacer cima. Vientos de
unos 72 kilómetros por hora, a más de 8.000 metros, lo hacen
prácticamente imposible y, al mismo tiempo, incrementan
peligrosamente la sensación de frío y el riesgo de congelaciones.
Las temperaturas registradas entre el Cuello Sur y la cima del
Everest se sitúan en torno a los 26º bajo cero.
Al mismo tiempo, las comunicaciones entre expediciones nos notifican la muerte de Christian Kuntner en el Anapurna (8.091 m.). Este escalador, nacido hace 46 años en el Tirol italiano, perdió la vida mientras bajaba de hacer cima en el que era su catorce ochomil. Fue a la altura del campo 2 cuando parece ser que recibió la embestida de un alud. Aunque Kuntner consiguió llegar al campo base, los médicos no pudieron hacer nada contra las graves hemorragias internas que sufrí.