Diferentes asociaciones y entidades dedicadas a la atención a inmigrantes constataron ayer, en una asamblea celebrada en el Casal Espai Solidari, «los enormes problemas y dificultades en el proceso de regularización puesto en marcha por el Gobierno», cuyo plazo finaliza el próximo 7 de mayo.
Según cálculos de estas entidades, en Balears hay unos 30.000 inmigrantes irregulares y «hasta el 7 de mayo no se habrán regularizado ni la mitad. Actualmente, apenas llegamos a los 12.000».
Mustafá Boulharrak, de CC OO, explicó que «existen numerosas trabas para la presentación de documentos. El procedimiento es muy confuso y las embajadas y delegaciones diplomáticas, las inspecciones de Trabajo y los propios empresarios, que deberían firmar contratos para legalizar situaciones labores irregulares, no están contribuyendo a facilitar el proceso. Por su parte, la Oficina de Extrnajería no tiene los medios necesarios para acelerar las tramitaciones».