«Un día para la esperanza», la Fiesta anual de Intermón Oxfam se celebró ayer en los jardines de Santo Domingo de la Calzada de Palma, en una celebración que tuvo lugar en 46 ciudades españolas y que estuvo dedicada a 900 millones de campesinos del tercer mundo y al comercio justo. El motivo de la fiesta está inspirado en la campaña que Intermón lanza en 2005: «Pobreza 0».
La finalidad del encuentro es promover la participación social y la toma de conciencia ante el problema de la pobreza de millones de personas en todo el mundo.
A los asistentes se les entregó una cinta blanca, símbolo mundial de la campaña «Pobreza 0». Se trata de una iniciativa encaminada a eliminar la deuda externa de los países del tercer mundo, aumentar la ayuda destinada al desarrollo y aprobar unas reglas comerciales justas.
«Los países capitalistas subvencionan sus propios productos e imponen aranceles a los del tercer mundo, con lo cual no tienen salida. Sin embargo, los países capitalistas no tenemos ningún problema a la hora de vender allí nuestros productos a precios altamente competitivos» lamentó una de las responsables de la organización en Palma, Marta Durán.
La fiesta estuvo, entre otros, patrocinada por la cadena Eroski, empresa que incorpora ya desde marzo el comercio justo como parte de su oferta habitual. Los numerosos asistentes pudieron asimismo conocer otros programas de Intermón Oxfam: programas de desarrollo de Burkina Faso y las actuaciones de emergencia llevadas a cabo por esta organización en Asia, tras el tsunami.