La teniente de alcalde de Medi Ambient del Ajuntament y presidenta de Emaya, Catalina Terrassa; la teniente de alcalde de Seguretat Ciutadana, Maite Jiménez; y la regidora de Sanitat i Consum, Marina Sans, presentaron ayer una serie de medidas que aplicará el Consistorio de inmediato para intentar paliar los efectos nocivos del «botellón», en especial en la zona del Passeig Marítim durante los fines de semana. La medida más novedosa será que los jóvenes o los adultos que sean multados por incumplir la normativa municipal de limpieza o la de ruidos, o ambas a la vez, tanto en el Passeig Marítim como en cualquier otra zona de Palma, podrán evitar el pago de dicha sanción si realizan trabajos comunitarios para la ciudad en alguna empresa municipal, sobre todo en Emaya. Cabe recordar que la ordenanza de limpieza establece que por una falta leve se puede imponer una sanción de entre 0 y 300 euros, y que por una grave se puede poner una multa de entre 301 y 900 euros. En cuanto a la ordenanza contra los ruidos, por una falta leve se puede sancionar con entre 0 y 150 euros, mientras que por una falta grave se puede multar con entre 151 y 300 euros.
Para permitir la sustitución de multas por trabajos comunitarios, ambas ordenanzas serán modificadas, de forma inicial, en el próximo pleno de Cort del 28 de abril. Sans indicó que el fin de semana del 29 y 30 de abril y durante los cuatro fines de semana siguientes se llevará a cabo una campaña informativa en la zona del Passeig Marítim, tanto de concienciación, para evitar el consumo excesivo de alcohol entre los jóvenes, como de explicación de las nuevas medidas contra la suciedad y el ruido que quiere aplicar Cort. La regidora de Sanitat i Consum recordó que, como medidas complementarias a las anunciadas, el Ajuntament está colaborando desde el curso 2003-2004 con la Fundació Projecte Home para realizar campañas informativas contra las drogodependencias en los colegios de Palma. La puesta en marcha de las nuevas medidas tendrá lugar el fin de semana del 3 y 4 de junio.
La presidenta de Emaya recordó, por su parte, que la empresa municipal ya había reforzado este año la presencia de contenedores en la zona del Passeig Marítim durante los fines de semana, con la instalación de 12 unidades adicionales, con una capacidad de 250 litros cada una. En total, entre contenedores y papeleras, hay en la actualidad 59 espacios donde poder depositar la suciedad que se crea en la zona. «Consideramos que, de momento, son suficientes», dijo. La teniente de alcalde de Seguretat Ciutadana presentó, por su parte, algunas cifras referidas a los controles efectuados el pasado año. Jiménez indicó que en 2004 se realizaron 100 controles, con un total de 1.100 vehículos controlados. Asimismo, señaló que el pasado año se redució el número de accidentes con respecto a 2003, bajando de 152 a 140. «Otro dato positivo es que el pasado año no falleció ninguna persona por accidente de tráfico en el Passeig Marítim, mientras que en 2003 hubo dos víctimas mortales», destacó, y añadió que continuarán los controles de alcoholemia.