El segundo mes del proceso extraordinario de regularización de trabajadores extranjeros en Balears se ha cerrado con un total de 10.352 solicitudes presentadas, de las que la tercera parte corresponden a ecuatorianos, lo que supone que en los últimos 30 días se han presentados 6.828 expedientes, casi el doble de los 3.524 que se registraron el primer mes. Este mayor ritmo de presentaciones de solicitudes llevó ayer al delegado del Gobierno en Balears, Ramon Socías, a afirmar que «cuando finalice el proceso, el próximo 7 de mayo, seguramente se habrán cumplido las previsiones de regularización de entre 20.000 y 30.000 inmigrantes».
Socías explicó que «con toda seguridad las fechas tempranas en las que este año ha caído la Semana Santa ha motivado que muchos empresarios hayan preferido esperar a abril o mayo para contratar a sus trabajadores». Si al acabar el primer mes habló de «preocupación», ayer el delegado hizo una valoración «enormemente positiva» y auguró que en el tercer mes «se van a presentar todavía más solicitudes, de modo que al acabar el plazo habremos llegado fácilmente a las 20.000 o 22.000 regularizaciones». Del tope estimado de 30.000 normalizaciones por trabajo, el delegado descontó las de aquellos extranjeros empadronados que son menores de edad, mayores de 65 o mujeres con hijos pequeños que no desean trabajar.
De las 10.352 solicitudes presentadas (el 3,30% del total del Estado), se han admitido ya el 97,70%, hasta 10.114; 184 han sido desestimadas y otras 54 están pendientes del certificado de penales. Socías reconoció también que el proceso «está haciendo aflorar una importante bolsa de economía sumergida», especialmente en el trabajo doméstico, que supone el 38% de las regularizaciones.