Los armadores-pescadores están dispuestos a vender pescado en los mercados municipales si el conflicto con los «peixeters» continúa. Así lo manifestaron ayer Bernat Bonet, presidente de Mallorca Mar (organización de pescadores que gestiona la subasta electrónica de la Llonja de Palma) y Biel Company, presidente de Asaja-Balears (en la que está integrada Mallorca Mar) tras reunirse con la consellera y el director general de Pesca, Margalida Moner y Miquel Àngel Calviño.
Mallorca Mar presentó a Moner un documento con una serie de propuestas para solucionar el conflicto. Entre ellas, se consideran innegociables el cierre de la barrera que da acceso a la zona de la lonja donde se prepara el pescado antes de sacarlo a subasta y no informar a los «peixeters» sobre el volumen de capturas, sólo del tipo de especies. Company afirmó que «los pescadores gestionan la Llonja y ellos deben decidir sobre las restricciones de accesibilidad. El libre acceso al pescado antes de la subasta supone una adulteración de la misma y atenta contra los pescadores como colectivo». Bonet explicó que «en otras lonjas nadie tiene acceso al pescado antes de la subasta».
Margalida Moner indicó que «los servicios jurídicos de la Conselleria estudiarán la viabilidad de las propuestas de Mallorca Mar». Los «peixeters» han presentado ocho denuncias contra la venta directa al público (al detall) puesta en marcha por Mallorca Mar en la Llonja de Palma.