Muchas son las imágenes fotográficas o de videocámaras que aficionados y profesionales captan del XI Festival Mundial de Danses Folklòriques que se celebra durante toda la semana en Palma y que tendrá su gala de clausura mañana noche en el velódromo de Son Moix, con la entrega de premios y galardones a los grupos participantes. Las plazas y calles de Ciutat se han llenado de tradicionales ritmos, vestidos típicos y culturas que se guardan con cariño a través de la música y de generaciones.
El grupo de danza Doña Urraca, de la Diputación de Zamora, celebra su cincuenta aniversario. La agrupación que dirige María Rosa Do Barros cuenta con 300 alumnos y tres grupos. Su baile es el tradicional de Zamora y para ello utilizan instrumentos como gaitas y tambores, pandereta, flauta tamborina, dulzaina percusión y voz. Vestidos ellos y ellas con el traje típico de carbajales de Alba o Aliste cautivan con un repertorio que va de una hora y media a dos de duración. Han participado en todas las ediciones que se han organizado en Palma y han recibido numerosos galardones y premios a lo largo de su ejemplar trayectoria.
Por otro lado, los grupos que participaron ayer en las distintas plazas reunieron a un gran número de público, en su mayoría turistas que contemplaron con atención el espectáculo de danzas. Por su parte, el jurado, que fallará mañana los resultados otorgando diversos premios, se centraba en las actuaciones de mañana y tarde que se realizan en el Auditòrium de Palma. Para esta noche se espera una gran asistencia al concierto benéfico para Aspanob, de Jean Paul Samputu & Ingeli Troupe.
Julián Aguirre