El director general de Pesca, Miquel Àngel Calviño, propondrá hoy a pescadores y «peixeters» un precio mínimo de salida para cada especie en la subasta electrónica de pescado en la Llonja de Palma, como posible solución al conflicto planteado entre ambos colectivos. Ésta sería la medida dirigida a los pescadores para conseguir un mejor precio. Si con precio mínimo, una especie no es adquirida, se sometería a una segunda subasta. Para los «peixeters», Calviño plantea que éstos sean informados cuando se produzcan volúmenes importantes de capturas, sea cual sea la especie, con el objetivo de que en la subasta no se registren pujas desproporcionadas en relación a la cantidad de pescado disponible. Los «peixeters» celebran asamblea esta tarde.
El director general ha convocado a ambas partes para tratar hoy estas propuestas con la esperanza de llegar a un acuerdo tras una semana de conflictividad durante la cual, en plenas fiestas de Pascua, los «peixeters» no han acudido a la Llonja del Peix a comprar género, lo que ha dificultado el acceso de los consumidores al pescado fresco mallorquín. Los «peixeters» han recurrido a pescado de la Península y los pescadores han vendido sus capturas a grandes superficies, hoteles, restaurantes (con los que ya se mantienen contactos para consolidar relaciones comerciales), mercados mayoristas de la Península y alguna pescadería, si bien en determinados puertos ya se ha puesto en marcha la venta directa al público.
En Palma, la venta directa al pública no se inicia hasta hoy, a las 9'30 horas de martes a sábado y a las 18'30 horas de lunes a viernes, aunque ayer por la tarde unas decenas de particulares acudieron a la Llonja del Peix con la idea de adquirir pescado fresco. Bernat Bonet, presidente de Mallorca Mar, organización que agrupa a los pescadores y gestiona la subasta electrónica, les explicó que esta entidad no estará autorizada hasta hoy para la venta directa, siempre después de someter el pescado a subasta.