La alcaldesa de Palma, la popular Catalina Cirer, mantuvo ayer un encuentro con los portavoces de la oposición, Antoni Roig por el PSOE, Eberhard Grosske por EU-EV y Pere Muñoz por el PSM, para intentar llegar a acuerdos en algunos de los asuntos de la actualidad municipal o en las polémicas vividas en los últimos meses. También estuvieron presentes en la reunión el portavoz del PP, Rafel Duran, y el teniente de alcalde de Urbanisme, el popular Javier Rodrigo de Santos.
Cirer comunicó a los portavoces de la oposición que en principio se prevé la creación de la figura del Defensor del Ciutadà para el próximo año, buscando el máximo consenso. Por lo que se refiere al diseño y a la celebración de futuros actos institucionales, Cirer propuso que haya una reunión previa de la Junta de Portaveus antes de la conmemoración de un acto concreto, en concreto 30 días antes de la celebración prevista, para intentar consensuar las actividades a desarrollar.
Más diferencias hubo en cambio a la hora de fijar una fecha concreta para poner en marcha dos propuestas defendidas por la oposición, una que prevé la elaboración de un censo por parte de Serveis Socials de todas las personas que viven en condiciones de marginación extrema y que carecen de un lugar donde vivir, y otra que prevé la realización de un estudio para conocer los casos de incumplimiento de la legislación por lo que se refiere a las licencias de actividad.En cuanto a la ubicación del nuevo hospital de Son Dureta en Son Espases Vell, la oposición volvió a mostrarse en contra.
Tras la reunión, los tres portavoces de la oposición hicieron un balance positivo, con matices, a la espera de comprobar si los compromisos anunciados por Cirer se irán cumpliendo en los próximos meses.
Por su parte, Duran indicó que el equipo de gobierno lleva trabajando desde hace meses en algunos de los asuntos tratados ayer, y reiteró que el PP buscará el consenso.