Los padres y madres de los alumnos del Colegio Público de Son Rullán deberán tomar una importante decisión el próximo lunes, día 7, que es la de si continuar con la jornada partida que ahora está vigente o cambiarla, de cara al próximo curso, por el horario lectivo intensivo.
Esta cuestión mantiene enfrentados a los partidarios del cambio con los defensores de dejar las cosas como están. Lo cierto es que el centro de educación Infantil y Primaria Son Rullán y el CP Establiments son los dos únicos ejemplos de colegios públicos con jornada partida existentes en Palma.
Y esta circunstancia es aprovechada tanto por un grupo como por su opositor. Pues mientras los padres que aspiran a cambiar la jornada se quejan de ser la excepción, los que quieren mantener la existente argumentan que «es justo que las familias tengamos alguna opción, aunque sean pocas, de escoger este horario entre los centros públicos y que los progenitores a los que no les vaya bien pueden matricular a sus hijos en un colegio con jornada continua, que son la gran mayoría», afirmó María Isabel Galindo, una de las portavoces de este grupo.
Éste es el tercer año consecutivo que se realiza la consulta en el colegio, sin que hasta el momento las familias valedoras del cambio hayan logrado el 65 por ciento de apoyos del total de personas que acudieron a votar, tal y como exige la ley.«En el colegio somos 633 familias, de las que en las últimas convocatorias hemos participado algo menos de 400 y las que queremos una jornada intensiva logramos un 53% de apoyos el año pasado y un 60,1% el anterior», reconoció Carmen Félix, una de las madres que encabeza el movimiento por el cambio y que espera que el lunes «vayan muchos padres a expresar su opinión».
Los alumnos cumplen actualmente una jornada de 9 a 12:30 horas y de 15 a 16:30 horas, salvo el viernes que acaban a las 14 horas, y la jornada intensiva o continua supondría dar clase de 9 a 14:00 horas.
El horario de votación el referéndum del lunes será de 9:10 a 12:30 horas y de 15:10 hasta las 17:30 horas.
El resultado será aplicable a partir del próximo curso, no obstante, la dirección ha explicado que, en caso de cambio, ese primer año el nuevo horario estará a prueba, con posibilidad de revertir la decisión en el curso siguiente mediante una nueva votación por parte de los padres.