El PSM, que defiende el «no» ante el referéndum del próximo domingo, cedió ayer al catedrático de Filosofía de la Universidad de Girona Josep María Terricabras (filósofo del lenguaje) el protagonismo del acto central de su campaña. Terricabras -al que presentó otro catedrárico, el mallorquín Llorenç Valverde- mantuvo que el texto que se somete a votación está «lleno de trampas» e ironizó sobre la campaña de los famosos que piden el voto favorable.
Citó, por ejemplo, a Miguel Ríos y se preguntó qué cómo puede decir que votará sí tras declarar que no la ha leído. También se refirió a que las grandes declaraciones sobre los derechos se entienden mejor leyendo los artículos completos. Y citó varios. «La Constitución acepta y reconoce el derecho a la vivienda. Es decir, que hace lo mismo que podía hacer un notario o cualquiera de nosotros, aceptar y dejar constancia de lo que hay alrededor», señaló.
Luego aludió también a «esos anexos que no se han distribuido en la edición que se repartió con los periódicos». Y explicó que «uno de esos anexos recoge que un estado podrá prever la pena de muerte para actos ocurridos en caso de guerra o peligro inminente». Y añadió: «Eso quiere decir que si algún día se quisiera reimplantar la pena de muerte, bastaría con acogerse a la Constitución».